01 noviembre 2020

CUARTO RETO: BULNES, ME QUITO EL SOMBRERO

"Una mirada al infinito con deseos de palpar su belleza. Un lugar bien conocido donde un día dejé mi huella".

La historia que a continuación contamos, merece, sin duda, un reconocimiento a los más pequeños de la casa y como premio una chapa de “Súper Montañeros”. Todo comienza en el funicular de Bulnes (Poncebos). Bulnes es un poblado situado entre montañas donde el acceso hasta hace bien poco era por una senda retorcida atravesando el canal del Texu. Hoy en día Bulnes es un poblado turístico donde se accede más cómodamente mediante el funicular. Las casas se han convertido en bares y alojamientos para visitantes. A nuestro parecer, es un poblado con mucho encanto.

Pues bien, tras pasear por sus pintorescas calles, encontramos una senda que ascendía hasta el Mirador del Naranjo de Bulnes, la senda del GR-202 dirección el Refugio de Áliva (https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/refugio-aliva-bulnes-27086883). Para hacer la jornada más llevadera, uno de nosotros accedió a la senda mientras el otro esperaba junto al río Bulnes con los niños. La senda no era sencilla para realizarla con niños tan pequeños sin ser porteados. La lástima es que no se alcanzó el mirador, por lo tanto, no se obtuvo la maravillosa imagen del Naranjo desde esa perspectiva.



Decidimos, entonces, volver por la senda que nos llevaría de vuelta a Poncebos (GR-202). La valoración de la senda sería de moderada. Son 4 km donde gran parte del descenso se realiza zigzagueando y por un camino estrecho. Sin duda, un gran mérito para los niños quienes, a pesar de todo, se portaron como unos verdaderos campeones. El paisaje en el descenso es impresionante. El mejor consejo que podemos daros es que consideramos que las mejores edades son a partir de los 6-7 años. Otra opción es portearlos en la mochila. Y una nota importante es que si subís con carro de bebé, el camino desde el Funicular a Bulnes, no es largo pero es incómodo.

Nos queda un muy buen recuerdo de esta experiencia donde encontramos personas realmente amables. La recompensa, además de la chapa (insistimos, muy bien merecida), fue un baño en las gélidas aguas del Río Cares.

Otro detalle a tener en cuenta es el tema aparcamiento. Hay un parking pequeño junto al funicular donde seguramente no encontraréis sitio. Pero existe la opción de aparcar a lo largo de la carretera, ya sea dirección Sotres o bien dirección el comienzo de la Ruta del Cares. Adjuntamos el enlace de wikilok de dicha ruta: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/ruta-del-cares-poncebos-cain-poncebos-5145198. Además, encontraréis a simpáticas cabras buscando la atención de la gente y, si cae, algo de comida.

Al final conseguimos inmortalizar el Naranjo de Bulnes desde un pueblecito muy cerca de Poncebos llamado Camarmeña. Un poco lejos, pero nos quedamos con la esencia.



Naranjo de Bulnes desde la carretera dirección Arenas de Cabrales


7 comentarios:

  1. Ayyyyyyyyyyyyy que chulo todo , estais hechos unos aventureros maximo nivel y mis peques son unos campeones Muackkkkkkkkkkkkkkk #aventurerosen familia#pequesmontañeros#vivenciasdelavida#naturaleza#especiales.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que este día fue muy especial... Besazos

      Eliminar
  2. Ay estos peques están hechos unos senderistas de nivel!! Qué maravilla que les estéis enseñando estas maravillas de nuestro país!Besazos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No os imagináis lo bien que nos hace sentir... Besazos

      Eliminar
  3. Preciosa historia con los momentos vividos, y buenas capturas para contar cada pasito del día en familia. Los peques tienen el camino bien enseñado y que sigan con esa estela, hasta el infinito y más allá!!1
    Además el día os acompañó para difrutarlo todavía más, y mejor.
    Qué placer leerte contadolo :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. :) Bien nos conoces... A ver si la estela nos acompaña siempre... Besazos

      Eliminar
    2. Cuidándola y manteníendola todo es posible... Musumuxu.

      Eliminar